Con todos ustedes, el auténtico, el original, el primer Gti que dió nombre a un concepto, el Golf GTi.
Quién le iba a decir a este pequeño utilitario de 1976 que sentaría un nuevo concepto dentro del automóvil, el de coche ligero, pequeño, sin una elevada potencia pero con la suficiente como para divertir a su propietario y poner en apuros a deportivos de mayores prestaciones en carreteras reviradas...
Además de introducir el concepto de utilitario deportivo y asequible, el Golf aportó en su época numerosas mejoras como ser uno de los primeros coches con inyección electrónica de combustible (la archiconocida Bosch K-Tronic) que el permitían obtener unos nada despreciables 110cv de un motor de 1.6 litros de cilindrada alcanzando luna punta de 182km/h y tardando tan sólo 9" en alcanzar los 100km/h en su marcador.Cifras por cierto, nada desdeñables en la época.
Además los ingenieros de VW, mejoraron el chasis reduciendo su altura en 20mm, mejorando el esquema de suspensiones (con amortiguadores de gas) y añadiendo estabilizadoras en ambos trenes.Así esta pequeña máquina de 810kgs de peso en vacío lograba un 12% más de aceleración lateral que el que un Golf normal.
Tampoco dejaron de lado el interior que recibía una decoración específica en los asientos tapizados con tela "a la escocesa", un volante de menor diámetro y con un diseño más deportivo, así como unos relojes de presión de aceite y temperatura que nos permitían tener controlado al brioso motor en todo momento.
Un lugar especial merece la mítica bola de golf a modo de palanca de cambios que se ha conservado en las posteriores versiones.
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